Es clave la erotización de la enseñanza, el aula como un espacio de encuentro entre generaciones, donde vivir cada hora de aprendizaje como una experiencia de descubrimiento y sorpresa, como un lugar que nos proteja de la rutina burocrática. Llevamos décadas de aburrimiento en que el pensamiento pelma ha machacado la herencia del Mayo del 68 y reclamado su castración definitiva.
LEER
No hay comentarios:
Publicar un comentario