¿asistimos a un fenómeno mítico que impulsa la poesía o es la poesía un pretexto para pasarlo "fenomenal"? Una cucharada más del segundo. Porque buena poesía no es una caña, ni una dosis más. Ni tampoco un consejo escolar como el de "paseante no hay camino, se hace camino al andar".
Lo más característico de la poesía excelente no es su intento de autoayuda sino su influencia a través de los serpentines del cuerpo y mediante su magia de platino que poblaría de moléculas el flujo de la sangre.
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